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5 cosas que tenés que saber antes de ver Akelarre, la película de brujas furor en Netflix
Dirigida por el argentino Pablo Agüero esta coproducción con España, está ambientada en el País Vasco en 1609 y regresa a los horrores del pasado como La inquisición y la caza de brujas para hacer un link con el feminismo.
Akelarre fue una de las grandes ganadoras en la 35 entrega de los Premios Goya llevándose cinco de los nueve premios a los que aspiraba: mejor maquillaje; diseño de vestuario; dirección artística; efectos especiales; y música original.
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EL IDIOMA
Filmada Íntegramente en el País Vasco, es una coproducción de España, Francia y Argentina. Está protagonizada por un elenco local y hablada en castellano y en euskera, aunque el realizador no habla ese idioma. Las seis actrices hablaban seis euskeras diferentes. Originalmente, los vascos no tenían escritura. Lo que sabemos sobre la manera en que se hablaba en el siglo XVII nos llega a través de transcripciones de clérigos, que tenían su propia visión parcial de las cosas. El director y su equipo tuvieron que buscar, con traductores, actrices y consejeros, una lengua que resultara fluida para lograr una interpretación que tuviera frescura.
EL LIBRO
La película se inspira en el libro Tratado de Brujería Vasca del juez Pierre Lancre quien en 1609 recorrió el País Vasco interrogando y condenando a decenas de mujeres a la hoguera por supuestos actos de brujería.La caza de brujas fue una realidad en todas las regiones de Europa y en gran parte del continente americano. Lancre describía a esas jóvenes “demasiado” libres y hermosas que literalmente lo “hechizaban”. Ejerció una represión atroz y una tarea de exterminio, como todos los otros jueces, pero él en particular tenía un imaginario cautivante. Contemporáneo de Shakespeare, impregnado de ese pensamiento barroco que sospecha voluntades ocultas detrás de todas las cosas, De Lancre veía al mundo como “un teatro donde el diablo interpreta múltiples personajes”.
EL FUEGO
Akelarre comienza con cinco grandes hogueras en las que están quemando mujeres. Filmar esta escena no fue fácil: «Tuve que discutir con el encargado de efectos especiales para convencerlo de trasladar hasta la colina la una turbinas enorme para generar un viento tan potente que hiciera inclinarse las llamaradas. Quemamos muñecos reales que luego fueron completados con efectos digitales“; contó el director. En todas las películas de Agüero hay fuego. Aunque a veces puede haber accidentes; durante el rodaje de su documental Madres de los dioses, Geraldine Chaplin, que interpretaba a Dios, debía iluminarse a sí misma con una vela pero algo salió mal y su pantalón de cuero terminó quemado.
El VESTUARIO
Trabajar en una película donde hay vestuario de época puede ser todo un desafío. En una entrevista el director dijo: «Las escenas de acción eran complicadas con vestidos dobles. Los actores que hacían de guardias se resbalaban con sus botas, se llegaron a caer hasta cuatro veces en una misma toma, se había convertido en un gag, nos dieron ataques de risa…”
LOS ANIMALES
Durante el rodaje, trabajaron con varios animales. En la escena del aquelarre; el cerdo se puso a gritar como loco, lanzaba mordiscos. Su amo se puso a hablarle y acariciarlo hasta calmarlo. ¡Pero entonces se quedó dormido! y hubo que esperar a que termine su siesta, para continuar.
